SAN PABLO.- Una de las jugadas que quedarán grabadas para siempre de la victoria Argentina ante Holanda fue el gran, y heroico, cierre que de Javier Mascherano a Robben, a los 45 minutos del segundo tiempo. Debido al esfuerzo, el volante de Barcelona comentó luego que esa acción le dolió muchísimo: "Me abrí el ano".
El partido se terminaba y los europeos tuvieron la última jugada en los pies del talentoso delantero de Bayern Munich, que se metió en el área y, en el instante justo, su disparo se topó con la pierna derecha de "Masche".
Luego del partido, el mediocampista argentino habló con un grupo de peridistas, entre ellos con los enviados de Canchallena.com, a quienes les realizó la curiosa confesión: "Me abrí el ano y por eso el dolor. No quiero ser grosero".
Luego, explicó: "Fue virtud mía, Robben me dio una posibilidad más. Me hace ganar un segundo más a mí. Cuando él toca, pierde un segundo y yo lo gano. Lo que hice que yo lo habría hecho cualquiera. Para estar en una final necesitás esa pizca de suerte".